
Es posible que tu dentista te haya recomendado alguna vez usar un irrigador para limpiar tu boca. Pero, exactamente, ¿el irrigador dental para qué sirve y quienes pueden utilizarlo? Permítenos ayudarte sobre esta cuestión.
¿Para qué sirve un irrigador dental?
Preguntarse “El irrigador bucal, ¿para qué sirve?” es algo muy común. En las consultas de los dentistas los has visto mucho; son esos pequeños tubos que expulsan un chorro de agua y que se utilizan en las limpiezas.
Pero, exactamente, ¿qué hace un irrigador dental en tu boca para que sea tan recomendado su uso?
- Gracias al chorro de agua a presión, elimina hasta un 99.9% de la placa bacteriana, ya que es más fácil desprenderla y luego retirarla con el cepillo de dientes.
- Cómo permite alcanzar cualquier parte de la boca, previene la aparición de caries, halitosis o gingivitis, eliminando el 99% de los gérmenes y bacterias.
- Podríamos decir que la función principal del irrigador dental es limpiar las bolsas periodontales de las encías, lo que no solo previene la gingivitis, también reduce la sensibilidad dental.
- Suele estar recomendado para personas que llevan ortodoncia o brackets, ya que el irrigador sirve para limpiar fácilmente el aparato con ayuda de su cabezal para ortodoncias.

¿Hemos respondido a la pregunta de “el irrigador, ¿para qué sirve?”? ¡Todavía hay mucho más:
- Si incluye una boquilla para la lengua, podrás eliminar la mancha blanca que se forma por las bacterias de los alimentos.
- Con la boquilla periodontal podrás eliminar fácilmente cualquier resto de placa, ayudando a que los dientes recuperen poco a poco su color natural.
- En el depósito puedes mezclar agua con enjuague bucal, triplicando la efectividad de la limpieza y dejando en tu boca una agradable sensación de frescura.
- Para los pequeños de la casa puede ser muy divertido usarlo, sirviendo para acostumbrarlos a una correcta rutina de limpieza dental.
- Es más práctico, y menos molesto, para retirar alimentos que se queden atrapados entre los huecos de los dientes.
¿Para qué no sirve un irrigador dental?
Ahora que ya tienes claro para qué sirve un irrigador, ¿hay alguna contra indicación? Pues, bien, es cierto que este producto está recomendado para todo el mundo, no obstante, hay casos muy puntuales en los que no se recomienda usarlo.
Por ejemplo, las personas que tengan heridas en la boca. Hasta que las heridas no se hayan cerrado, no deberían utilizarlo. No solo porque el contacto del chorro con la herida podría resultar molesto, es que este podría hacer más grande la herida o ayudar a las bacterias a introducirse en el interior de la misma.
En estos casos, se recomienda a los usuarios usar, únicamente, el cepillo de dientes, enjuague bucal e hilo dental hasta que la patología esté curada.
Tampoco es recomendable usarlo cuando se tiene una caries abierta, ya que el chorro podría entrar en contacto con el nervio de la muela y producir un dolor muy desagradable para el usuario. Si se ha puesto un empaste, no utilice el irrigador hasta el día siguiente para asegurarse que se asienta bien la sustancia a la muela.