Saltar al contenido
Te explicamos como elegir un irrigador dental y cuál comprar

Lo que debes saber antes de comprar un irrigador dental

Escoger un irrigador dental no es algo que debas hacer a la ligera, ya que tienes que elegir uno que sea perfecto para tu boca. Por eso, vamos a darte una serie de consejos para que puedas seleccionar el más apropiado.

¿Qué debes tener claro antes de comprar un irrigador?

Mientras estás mirando los diferentes modelos del mercado, estaría bien que valorases estos cinco puntos que vamos a mencionar:

El irrigador no es un sustituto del cepillo de dientes

Erróneamente, muchos creen que utilizar un irrigador significa no tener que volver a usar un cepillo de dientes.

Craso error. El irrigador nunca será un sustituto para el cepillo, ya que lo que hace es mejorar la limpieza si se complementa con él.

Vale más la experiencia de la marca que el precio

No es malo fijarse en el precio. Sin embargo, a veces es mejor pagar un poco más por una marca de renombre que por una blanca con la que tendrás que cambiar el irrigador al poco tiempo.

Por ejemplo, tienes la marca Waterpik en el que encontrarás múltiples irrigadores. ¿Cuál comprar de la marca? Dependerá un poco de tus necesidades.

Cuántos más extras incluya, mejor

Todos los irrigadores incluyen lo que se conocen como “boquillas estándar o básicas”, es decir, que únicamente disparan el chorro de agua.

Aparte, también pueden incluir boquillas para ortodoncia, periodontales… O, en el caso de tratarse de un modelo inalámbrico, una bolsa de viaje. Recuerda: Paga menos por más, de lo contrario los extras tendrás que comprarlos aparte.

¿Cuáles son las necesidades de tu boca?

Lo más importante a la hora de elegir un irrigador no es el precio, es priorizar las necesidades de tu boca.

¿Qué problemas tienes? ¿Qué tipo de limpieza necesitas? ¿Tienes sensibilidad dental? ¿Llevas coronas o implantes? Ten todo esto presente mientras analizas las características de los irrigadores que te interesen, no vayas a comprar uno que no te sirva.

La experiencia de otros usuarios te resultará muy valiosa

¿Sabes cuál es el mejor lugar para obtener información de primera sobre la calidad de un irrigador? Las opiniones y valoraciones de otros usuarios.

A través de sus experiencias podrás saber cuáles son los problemas más comunes, las ventajas y que tal les ha ido a otras personas que puedan tener tus mismos problemas. 

Los 5 tips para elegir el mejor irrigador para ti

Además de todo lo anterior, te aconsejamos seguir estos tips para comprar un irrigador bucal y no equivocarte en el proceso:

No te centres solo en el precio

Solemos cometer el error de fijarnos demasiado en el precio a la hora de comprar un producto. No, no es malo querer que haya una buena relación de calidad-precio.

Ahora bien, piensa que estás comprando un irrigador para cuidar de la salud de tu boca y de la de toda la familia. ¿Le pondrías precio a eso?

A veces, merece la pena pagar un poquito más por tener ciertos extras, como pueda ser una buena atención al cliente, un producto de mayor calidad o funciones que puede que resulten más beneficiosas para tu boca que los irrigadores más baratos.

Portabilidad del irrigador

Es importante utilizar el irrigador tras las comidas, por lo que si pasas mucho tiempo fuera de casa, igual te interesa un irrigador inalámbrico que antes de uno de sobremesa.

Otra opción es tener uno en el lavabo y comprar lo que se conocen como irrigadores mini. Son más pequeño, y tienen menos potencia, pero caben en el bolsillo del pantalón o el bolso. Además, cuentan con un compartimento para guardar la boquilla que quieras usar, por lo que no se romperá cuando lo cargues.

Por supuesto, también queda la opción de un irrigador inalámbrico o portátil, pero son más grandes pesados. Aunque incluyan su propia bolsa de viaje, no son cómodos para llevar de un lado a otro. Están más pensados para dejar en el baño del trabajo.

Regulación de la potencia

Todos los irrigadores permiten, de un modo u otro, regular la potencia del chorro para adaptarlo a las necesidades de la boca del usuario.

Por ejemplo, los modelos de sobremesa incluyen un dial que permite cambiar el nivel del chorro de 1 a 10. En cambio, los modelos portátiles o inalámbricos suelen tener modos preconfigurados, generalmente el NORMAL, SOFT, PULSE y HIGHT.

Otros modelos inalámbricos cuentan con lo que se conoce como modo DIY, que va aumentando la potencia del chorro poco a poco desde el nivel SOFT hast ael HIGHT. Esta potencia la puedes cambiar tú pulsando el botón MODE a voluntad.

Situación de tu boca

No es lo mismo limpiar la boca para eliminar la placa bacteriana que tratar una afección como la gingivitis, halitosis o un aparato dental.

Asegúrate de elegir un irrigador que esté especialmente diseñado para la afección que tengas. De lo contrario, solo estarás tirando el dinero.

Por ejemplo, si sufres sensibilidad dental, te interesará un irrigador que tenga modo suave o masajee las encías. Para la halitosis, uno que se pueda mezclar con el enjuague bucal. O para la gingivitis que tenga mucha potencia para eliminar las bacterias.

Consulta tantas comparativas como puedas

Si estás en duda entre varios irrigadores, puedes consultar las comparativas para ver cuál es mejor.

Las mismas marcas ofrecen en las fichas de sus productos comparaciones entre los diferentes modelos. También te ayudará leer reseñas que analicen no solo las características de cada modelo, sino también sus puntos positivos y negativos.

Tu dentista también puede guiarte

Cómo bien sabes, es bueno acudir al dentista al menos una vez al año para hacerse una revisión. 

Es más, podría aconsejarte sobre que irrigador comprar según la situación de tu boca. ¿Quién mejor para guiarte en la compra? No solo puede recomendarte la mejor marca, también el modelo que mejor se ajuste a tus necesidades.

Y aunque empieces a usar un irrigador, recuerda; No debes saltarte las citas que tengas programadas para realizar un seguimiento de la mejoría de tu boca.

Noel Herrerias